(AP).-La
Procuraduría General de la República (PGR) no quiere firmar un acuerdo
para el intercambio de datos con autoridades brasileñas, por lo cual se
mantiene entre sombras la información que puede aclarar el pago de
sobornos de la constructora Odebrecht en México.
La historia de Odebrecht en México comenzó en 2005 y
concluyó en 2017. En este periodo, Petróleos Mexicanos les avaló decenas
de convenios por miles de millones de dólares, pese a que en 2016
brotaron acusaciones de corrupción en contra de ese conglomerado
brasileño por sobornar a funcionarios públicos en diversas naciones de
América Latina.
Río de Janeiro, 10 de octubre (AP).- La información que podría
aclarar el pago de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht en
México está bloqueada en Brasil desde hace más de un año porque la PGR
no quiere firmar un acuerdo para el intercambio de ese tipo de datos.
El Ministerio público brasileño explicó en un escrito enviado a The Associated Press
que rubricar ese documento es obligatorio para que México pueda
utilizar la información aportada por ejecutivos de Odebrecht o testigos
del caso bajo los acuerdos de colaboración suscritos con esa fiscalía.
La constructora reconoció ante la justicia estadounidense a fines de
2016 haber hecho pagos millonarios a altos funcionarios en varios países
latinoamericanos, lo que provocó la apertura de investigaciones contra
numerosas autoridades, incluidos presidentes y ex presidentes, en una
decena de naciones de la región.
La gran mayoría de estos países tuvieron que suscribir
con Brasil documentos similares al exigido a México y, con esa
información como base, consiguieron procesar a muchos de los implicados.
En el caso mexicano, Odebrecht confesó el pago de 10.5
millones de dólares en sobornos a funcionarios de Petróleos Mexicanos
(Pemex) en un periodo comprendido entre 2010 y 2014.
El escándalo creció con la divulgación de una serie de videos de
supuestos testimonios judiciales de ex ejecutivos de la constructora
-como el ex director en México Luis de Meneses-, que involucraban
directamente al ex director de Pemex, Emilio Lozoya.
Lozoya, que en 2012 trabajaba en la campaña electoral del
actual Presidente Enrique Peña Nieto y del Partido Revolucionario
Institucional (PRI), negó siempre haber recibido sobornos. Pero en las
mencionadas grabaciones los ejecutivos de la empresa brasileña
explicaban con detalle cómo el mexicano los ayudó a conseguir contratos y
cómo le pagaron por sus gestiones.
Pese a estas evidencias la Fiscalía mexicana no ha dado a conocer
avance alguno en la investigación a pesar de que la entidad mexicana que
vela por el acceso a la información le pidió divulgar los datos
disponibles. La Procuraduría General de la República insiste en que
sigue esperando que Brasil le proporcione los documentos necesarios.
En varios comunicados sobre el tema la Procuraduría solo indicó que
ha tomado declaración a 10 funcionarios y nueve ex funcionarios de Pemex
y a más de tres directivos de la constructora, entre ellos, Marcelo
Bahía Odebrecht.
La Fiscalía brasileña, por su parte, recordó que los países
interesados en los datos de este expediente “deben respetar reglas como
la prohibición de uso de dicha información en contra de los
colaboradores”.
Pero México no ha aceptado esta condición ni ha explicado
las razones de su negativa, con lo que Brasil “no está en posición de
facilitar la información requerida”, agregó la respuesta de las
autoridades brasileñas.
Por otra parte, Brasil también se quejó de que México no ha corregido
unos documentos para el intercambio de información que ellos
devolvieron en julio porque “no cumplían con los parámetros o criterios
legales para ser procesados”.
La AP solicitó a la Procuraduría General de la República aclaraciones sobre el tema, pero no obtuvo ningún comentario.
En una nota del 13 de agosto de 2017, la Procuraduría indicó
que representantes de la empresa ofrecieron un acuerdo reparatorio,
mismo que no ha sido aceptado, pero no está claro si tiene algo que ver
con el que bloquea la entrega de documentos por parte de Brasil.(sinembargo).